Como la mayoría de los colombianos aporta al sistema de pensiones pero no logra cotizar lo necesario para recibir una pensión, sus aportes terminan subsidiando a dos millones de exfuncionarios que reciben 40 billones de pesos.
Uno de los analistas del Banco Interamericano de Desarrollo califica el sistema como el de un Robin Hood al revés, en el que los ricos terminan disfrutando lo que trabajaron los pobres.
Fuente: NOTICIAS UNO